Si algo me queda claro es que la quema no es es la opción más completa, sólo en contadas ocasiones debe debería ser lo recomendable, pero está claro que no debería ser la norma.
Aunque a nivel sanitario puede tener algún sentido la destrucción de los resto de poda
, debido a que estos pueden ser una gran fuente de inóculo de enfermedades. Lo cierto, a la hora de la verdad,es que en cuanto a enfermedades que afectas a la vegetación y fruto, la madera en el suelo no tiene inóculo con capacidad de infección. Si que para las enfermedades de madera puede tener importancia, aunque se soluciona si los resto de poda se trituran y se incorporan al suelo.
Es posible que restos de de plantas, brazos, cepas enfermas, tengan como mejor destino su destrucción por el fuego, pero ¿no se podrían aprovechar para que este fuego fuese útil como fuente de energía en nuestras casas, industrias o bodegas?
Está más que contrastado que la incorporación de los restos de poda son muy beneficiosos para el suelo, para la mejora de su estructura. No me queda tan claro si a nivel energético, transportar los restos de poda para su utilización como biomasa, sea realmente sostenible, pero los números deberían ser sencillos de hacer para un especialista en energía.
Lo que está claro que está práctica de la quema, no es la mejor opción.